miércoles, 5 de noviembre de 2014

Orando… Sanando !


religion







Para recuperarse de la Codependencia debe asistirse a un Terapia en Doce Pasos, un programa espiritual por medio del cual nos volvemos conscientes del modo en que nuestro esfuerzo por solucionar nuestros problemas de una forma desadaptativa ha generado a su vez nuevos problemas. Aprendemos a confiar en Dios, tal y como nosotros lo entendamos, y en nuestro grupo de doce pasos, como nunca, fuimos capaces de hacerlo con nuestros propios padres. Durante el desarrollo de ese CAMBIO personal, nos compenetramos en la relación con Dios, cedemos el poder de transformarnos internamente a un Ser Superior a nosotros, de allí que presente una serie de Oraciones y Fragmentos Bíblicos que pueden fortalecer ese compromiso que se adquiere para Sanar esta Adicción. ¡Solos no podemos, necesitamos apoyarnos en otros y en Dios!
Oración por la Serenidad:

Dios, dame la serenidad de aceptar las cosas que no puedo cambiar;
Valor para cambiar las cosas que puedo; y sabiduría para conocer la diferencia.
Viviendo un día a la vez;
Disfrutando un momento a la vez;
Aceptando dificultades como el camino a la paz;
Aceptando, como hizo Él, este mundo pecador tal como es, no como yo lo tendría;
Confiando que Él hará bien todas las cosas si yo me rindo a Su voluntad;
Que yo sea razonablemente feliz en esta vida y sumamente feliz con Él Para siempre en la próxima.
Amen.!
Oración contra los apegos y obsesiones:
Dios mio, tu eres el importante. Tu, el infinito, que todo lo sostienes con tu gran poder. Si tu te apartaras de mi, yo me esfumaría como el vapor.
Creo en ti, espero en ti, te amo. Solo tu mereces la adoración del corazón humano y solo ante ti debo postrarme. Solo tu eres el Señor, glorioso, con una hermosura que ni siquiera se puede imaginar.
Por eso Señor, no permitas que yo adore cualquier cosa como si fuera un dios, porque ningún ser y nada de este mundo vale tanto.
Enséñame a descubrir mi dignidad, porque soy infinitamente amado por ti, para que no me arrastre detrás de cosas de este mundo ni me convierta en esclavo de posesiones ni de afectos. No permitas que las obsesiones me quiten la alegría.
Sana mis sentimientos de insatisfacción para que alcance una verdadera libertad interior. Enséñame a gozar de las cosas buenas sin necesidad de poseerlas o de aferrarme a ellas.
Te reconozco a ti como mi único dueño, el único Señor de mi vida. No permitas que pierda la Serenidad cuando algo se acabe; no dejes que me llene de angustias por temor a perder algo.
Solo abandonándome a ti podre sanar mis angustias, sabiendo que nada es absoluto. Solo Tu.
Señor mio, dame un corazón humilde y libre, que no este atado a las vanidades, reconocimientos, aplausos. Dame un corazón simple que sea capaz de darlo todo, pero dejándote a ti la gloria y el honor.
Derrama en mi tu gracia para que pueda vivir desprendido de los frutos de mis esfuerzos, para que en mi trabajo busque sobre todo tu gloria, sin obsesionarme esperando determinados resultados.
Dame ese desprendimiento Señor, liberame del orgullo, para que pueda trabajar intensamente, pero con la santa paz y la inmensa felicidad de un corazón desprendido.
Te entrego todos mis deseos, todos mis sueños, todas mis necesidades. Colma mi interior insatisfecho como tu quieras. Ya no quiero empecinarme en lograr la felicidad a mi modo y prefiero confiar en tu amor, que me dará lo que necesito de la manera mas conveniente.
Te entrego Señor, todo lo que tengo y todo lo que estoy viviendo. Te doy gracias por lo que me estas regalando y lo disfruto con gozo. Te lo entrego todo para que acabe cuando tenga que acabar.
Y te proclamo a ti, Jesús, como único Señor y dueño de todas mis cosas, de todo lo que vivo, de todo lo que soy y de todo mi futuro. Me darás la felicidad que necesito porque confió en tu Amor. ¡ Amen !
(Víctor Manuel Fernandez)


Efusión al Espíritu Santo (Una Nueva Vida):
Espíritu Santo de Dios,
ven en mi auxilio y enséñame a orar.
Derrámate en mi corazón y conviérteme.
Ven a reparar en mí las heridas del pecado.
Dame la gracia de perdonar de corazón a mis hermanos
e inúndame con tu paz.
Unifica todo mi ser,
ven a poner orden en todas mis cosas
para que todo en mi vida responda a la voluntad de Dios.
Dame docilidad para seguir tus inspiraciones
y fortaleza para resistir las tentaciones.
Sana toda mi historia y pon tu consuelo allí donde faltó.
Colma de tu amor cada momento de mi historia.
Ayúdame a vivir en la Presencia de Jesús
y bajo el amparo de María, mi Madre Celestial.
Amén.!



No hay comentarios.:

Publicar un comentario